El norte del país también ofrece un porcentaje de absentismo tres veces inferior al gallego
Los parques industriales lusos intensifican la labor comercial ante el próximo lanzamiento
in Faro de Vigo, por José Carneiro, 29-04-2016
La presión ejercida desde el norte de Portugal para captar inversiones del sector del automóvil por las que también compite Galicia, lejos de estabilizarse, va en aumento. Los lobbies empresariales y los promotores de suelo del país vecino esgrimen como principales argumentos para atraer nuevas fábricas los costes salariales en la región, literalmente un 50% inferiores a los de la media del sector en Galicia; el índice de absentismo laboral, también un tercio inferior el gallego, y los precios low-cost del terreno, con promociones incluso a 1 euro el metro cuadrado en función de la inversión y del número de puestos de trabajo que se vayan a crear. En este contexto de competencia eurorregional, algunos parques empresariales cercanos a la frontera gallega preparan ya nuevas ampliaciones, como el de Valença (de entre 60.000 y 70.000 metros cuadrados), con el fin de aprovechar las nuevas oportunidades que pueda traer el próximo lanzamiento de PSA Peugeot Citröen.
La comunidad gallega parte de una posición competitiva inferior en costes. Según un estudio elaborado por la consultora alemana Roland Berger, la mase salarial en el sector del auto en Galiciaronda los 17.500 euros anuales por trabajador directo, frente a los 8.900 euros en el norte de Portugal (casi la mitad). Y en el caso del empleo indirecto, la masa salarial gallega ronda los 22.400 euros anuales, mientras que al otro lado de la frontera se sitúa en 11.300 (un 49,5% menos). La diferencia entre regiones es mayor si se analizan las tasas de absentismo laboral, según la misma consultora. Así, en Galicia la media está en el 5,9% (en el caso del centro de Vigo de PSA, el último dato conocido es del 6,46%), frente al 2% del norte luso, que a mayores tiene una apertura de horas de trabajo el año mayor (1.900 horas frente a 1.748).
En esa pugna por captar nuevas inversiones, el otro hándicap de Galicia sigue siendo el coste del suelo industrial, sobre todo al sur de la provincia de Pontevedra. El informe de Roland Berger recoge que el precio medio del metro cuadrado en la provincia se mueve en una horquilla de entre 120 y 350 euros, y entre los 12 y los 80 euros en el resto de Galicia. En el norte de Portugal, en cambio, los precios oscilan entre cero y 50 euros el metro cuadrado. En municipios como Águeda, algunas promociones han llegado incluso a vender parcelas a 1 euro el metro cuadrado para captar industrias como la multinacional india Sakthi, que pondrá en marcha una fundición para el automóvil.
Solo en el último año, la zona más septentrional del país vecino captó inversiones por valor de más de 310 millones de euros para la apertura de nuevas fábricas o en la ampliación de instalaciones, buena parte de las cuales estaban relacionadas directa o indirectamente con el proyecto K9 del grupo PSA, como avanzó FARO.
Conscientes de que el próximo lanzamiento al que opta la planta viguesa podría acarrear la llegada de más empresas e inversiones, los promotores de suelo lusos están intensificando su labor comercial para repetir el éxito de estos últimos años, y parques como el de Valença ya proyectan ampliaciones de entre 60.000 y 70.000 metros cuadrados. También frente a la plataforma logística de Salvaterra-As Neves, en Monção, se sigue adelante con el proyecto de Minho Park, con otros 50.000 metros cuadrados y capacidad para acoger unas 80 empresas.